lunes, 24 de diciembre de 2007

LA ZAMACUECA EN AMERICA

Aproximación Histórica
por Paco Vallejos Salcedo

















Marinera tradicional en el caserío de Pómape, Lambayeque (2007)
Foto: Paco Vallejos

INTRODUCCIÓN
Zamacueca se le denominaba en el siglo XIX a lo que hoy conocemos con el nombre de Marinera Limeña, y que algunas personas la nombran erróneamente como “Canto de Jarana”, pero que los viejos cantores como los Ascuez, “Canario Negro”, Montes y Manrique, etc. jamás lo llamaron así. Siendo el “canto de jarana” o “contrapunto de marineras”, solo una forma de cantar la Marinera Limeña. Se desarrolló, principalmente, en la zona conocida como Malambo, hoy Avenida Francisco Pizarro, en el distrito del Rímac. Luego se fue difundiendo al resto de barrios populares tradicionales limeños, para después traspasar las fronteras del Perú. Durante el transcurso de dicho siglo, fue llamada de diversas maneras: Zapateado, Zamba, Zamba-Clueca, Zamba-Cuque, Zamba-cueca, Zamacueca, Sanguaraña, Baile de la Tierra, Maicito, Ecuador, Zajuriana, Mozamala, Chocolate, Miz Miz, Baile de Pañuelos, Polka de Cajón, etc. Don José Durand Flores, en su artículo “De la Zamacueca a la Marinera”, publicada en la revista Mensajes (1971) señala que se conoció como “Zamacueca Chilena” o “Chilena” a secas a la forma en que los soldados chilenos cantaban la zamacueca peruana en Lima, al finalizar la batalla de Yungay en 1839 con el triunfo de Ramón Castilla sobre Santa Cruz, presidente boliviano que quería anexar el sur peruano a Bolivia. Los soldados chilenos habían venido a apoyar a Castilla; siendo presidente del Perú don Agustín Gamarra.

Acuarela Pancho Fierro

ESTUDIOS DEL ORIGEN Y DIFUSIÓN DE LA ZAMACUECA PERUANA
Según el estudioso peruano José Durand Flores, la primera información del nombre “Zamacueca”, figura en el Archivo de Indias de Sevilla (España), que data “…aproximadamente 1780, con estrofas diversas y una pauta con una línea melódica de la misma”. (Entrevista de Guillermo Durand A. a José Durand F. ,1987).
Sin embargo, existen indicios anteriores de su presencia, debiendo tenerse presente que el Obispo de Trujillo, Jaime Baltasar Martínez de Compañón, mandó pintar escenas costumbristas en el norte del Perú a fines de 1700 y en una de ellas se aprecia a una pareja, de mestizo con indígena, bailando al ritmo de una vihuela (antecesora de la guitarra) y otra persona haciendo palmas, curiosamente similar a la forma que corresponde a la Zamacueca. El Obispo también dejó partituras impresas de las tonadas relacionadas con dicho baile similar a la Zamacueca, como “La Donosa”, “El Conejo”, “Lanchas para Bailar”, cuyos ritmos se acercan incluso a la actual Marinera. ( en “Trujillo del Perú”, Monseñor Jaime Baltasar Martínez de Compañón y Bujanda - Vol II, 1782).




LA ZAMACUECA EN AMERICA
Con el nombre de Zamacueca, viajó por las tres Américas y Europa durante el siglo XVIII y XIX, dando origen a otras expresiones, que hoy en día, son consideradas folklóricas en otros países. Así, la “Zamacueca” llegó a Santiago de Chile en el año 1825, siendo recortada la denominación a “Cueca”, allá por 1862; como nos lo recuerda el historiador chileno José Zapiola, en su libro editado en 1872, “Recuerdos de Treinta Años, 1810 -1840”. Zapiola fue muy amigo de José Bernardo Alcedo, autor de la letra del Himno Nacional del Perú, con quien visitó el barrio de Malambo en una de sus visitas a Lima, entrando en contacto con la Zamacueca.
El músico chileno, Pablo Garrido, en su libro “Biografía de la Cueca” (1943), citando a José Zapiola, nos cuenta que: “Al salir de su pueblo natal las “Petorquinas” (que eran tres hermanas: Tránsito, Tadea y Carmela) eran ya famosas (bailando)… Antes de debutar en la capital, recibieron lecciones provechosas de la afamada “Monona” y triunfaron ampliamente en el Parral de Gómez...”.
Pablo Garrido señala también que otro historiador chileno de nombre Benjamín Vicuña Mackenna, refirió: “que “La Monona”, hermosa zambita limeña empleada en la Legación peruana de Santiago de Chile, huyó de sus patrones para instalarse cómodamente en el Parral de Gómez y luego en los Baños de Huidobro, contratándosele para bailar la Zamacueca ante los ávidos parroquianos de tales sitios públicos”, (allá por 1830). La Monona creó escuela y tuvo discípulas aventajadas, entre ellas las célebres Petorquinas”.
Por su parte, Clemente Barahona Vega, chileno, también mantiene la tesis de que la Zamacueca les llegó de afuera, en su libro “La Zamacueca y la Rosa” de 1911, pero se resiste a decir que es de origen peruano.



"Cueca", baile de Chile

En dicho país, actualmente, el pueblo de Tarapacá le llama “Cachimbo” y la siguen bailando los descendientes de los peruanos que se quedaron después de la invasión chilena. En el resto del país mapocho le llaman “Cueca”, recortado el nombre peruano de Zama-cueca. Es decir Zamacueca y Cueca son el mismo baile. Como Zamacueca y Chilena, también son el mismo género con estilo diferente. Pero cuando llega la Zamacueca a Chile, se encuentra con su antiguo baile afincado allá también: la Zamba.
El americanista uruguayo Fernando Assuncao, también afirma la procedencia peruana de la Zamacueca en su libro “Aportaciones para un Estudio sobre los Orígenes de la Zamacueca” (1970).
En Bolivia las etnias negras, de la zona del Beni, actualmente le llaman “Cueca Negra”, el resto del país altiplánico le llama “Cueca” simplemente. A ellos les llegó vía Chile.
En Argentina, en la provincia de Cuyo le llaman “Cueca Cuyana”, en Jujuy y Salta le llaman “Bailecito” y, en el resto del país, le llaman “Zamba” al igual que en Uruguay.






"Zamba", baile argentino


En Ecuador, nos narra Carlos Vega (en “Danzas y Canciones Argentinas” de 1936), el francés Ernesto Charton de Treville, dejó constancia que asistió a reuniones familiares en Quito, dando cuenta que a las canciones tristes siguen las alegres, como “… la Zamacueca, que animada por el ardor natural de los indígenas (gente del lugar, los criollos), se transforma en una danza loca, desordenada, frenética”. Esto es en 1862.
A México llegó con uno de sus antiguos nombres peruanos, el de “Chilena”; y hoy forma parte del repertorio de folklore mexicano, en los Estados de Oaxaca y Guerrero, manteniendo el ritmo de la Zamacueca y es bailado con banda de músicos. La melodía nos recuerda a marineras del norte peruano.


Baile "Chilena" de Oaxaca , México


EL FANDANGO Y LA ZAMACUECA
En España, Jaume Ayats (Presidente de la Sociedad Española de Etnomusicología), sostiene que algunos bailes de Sudamérica habrían llegado a España en el siglo XVIII como el Fandango antiguo.
El estudioso peruano José Durán Flores, en el libro “Canción Criolla” (1987), en su artículo “Palmero Sube a la Palma”, nos dice como “La Macarrona”, vieja “bailaora” española, se emocionó al encontrar un parecido entre el Fandango antiguo y la Marinera Limeña (Zamacueca). Incluso, Carlos Vega, investigador argentino que realizó trabajo de campo en Perú, Chile y Argentina, llega a la conclusión de que la Zamacueca, según máximas probabilidades, debió nacer con este nombre por 1810 en Lima, como un derivado del Fandango antiguo.
Y, posiblemente, por los datos consignados hasta este momento, este Fandango antiguo haya tenido su origen en Lima, y hasta puede haber dado origen a la Zamba primero y después a la Zamacueca o a ambos a la vez. El Fandango español actual sería un nieto evolucionado de este.
Recordemos que Lima era el centro de irradiación cultural durante el virreinato hacia todas las colonias, como nos lo describe en sus libros “Lima, Foco Peruanizador de Sudamérica” (1945) y “Los Bailes Criollos en el Teatro” (1946, pp. 95-99). Según Vega, la Zamacueca dio origen a la “Cueca” chilena y la “Zamba” argentina. Los escritos de los historiadores chilenos, uruguayos, bolivianos, argentinos y peruanos le dan la razón con fundamentos históricos y bibliográficos.


CONCLUSIONES
- La zamacueca, actualmente llamada Marinera es un producto cultural de origen peruano.
- En su paso por distintos países en América, la Zamacueca originó bailes y cantos, que actualmente forman parte de la cultura de dichos países; tal es el caso de Chile, Argentina, Uruguay, Bolivia y México.
- Sin tomar en cuenta los cambios de denominación de la Zamacueca, si consideramos en cuenta la documentación más antigua que se tiene sobre la misma, podemos afirmar que su vigencia sobrepasa los dos siglos de presencia cultural y social.
- La importancia de la Zamacueca, hoy Marinera, es de tal magnitud en la identidad cultural latinoamericana que ha venido siendo objeto de estudio por importantes americanistas hasta la actualidad.


Lo expuesto es el inicio de futuras profundizaciones sobre diversos aspectos relacionados con la Marinera, y que serán materia de publicación en forma periódica en este blog.

6 comentarios:

César Recuenco Cardoso dijo...

Hola... Soy el autor de un libro sobre la marinera denominado: "nuestra Marinera... Una reina de la identidad nacional" el mismo que fuera presetnado el 26.01.07 en la III Feria del Libro y en el marco del XLVII Concurso Nacional de Marinera, ambos en la ciudad de Trujillo.
Seguimos en contacto para cualquier intercambio de informaciòn.
Saludos cordiales,
César!

Benjamin dijo...

Quisiera Paco, que comentara acerca de las leyes que rigen y respaldan a nuestra Marinera como identidad nacional.
Cordialmente,
Benjamín

EL TUNANTE dijo...

Paco, me agradria que, le des un renacimiento a tu pagina, un abrazo
El Tunante"

Manuel Hidalgo dijo...

FElicitaciones ... Interesante las citas de Carlos Vega. Espero mas aportes suyos . . . .

Manuel Hidalgo dijo...

FElicitaciones ... Interesante las citas de Carlos Vega. Espero mas aportes suyos . . . .

R dijo...

Podría sintetizar la bibliografía entera al fina porfavor.gracias!